Esta receta de ensalada de calabacín y mozzarella es una combinación fresca y deliciosa que captura la esencia de los sabores del verano. El calabacín, con su sabor suave y textura ligeramente crujiente, se convierte en el protagonista de este plato, ofreciendo una base ligera y refrescante. Al combinarlo con la cremosidad de la mozzarella y la acidez de una vinagreta sencilla, el resultado es una armonía de texturas y sabores que deleita el paladar en cada bocado.
Lo que hace que esta ensalada de calabacín y mozzarella sea tan especial es su simplicidad y versatilidad. No requiere de cocción, lo que la convierte en una opción ideal para esos días calurosos en los que no quieres encender la estufa. Además, se adapta fácilmente a tus gustos. Puedes añadirle tomates cherry para un toque de dulzor, albahaca fresca para un aroma herbal o incluso aceitunas negras para un sabor más intenso. La belleza de esta receta radica en su capacidad para transformarse con unos pocos ingredientes adicionales.
Ya sea como una guarnición ligera para una comida al aire libre o como un plato principal saludable para una cena rápida, esta ensalada de calabacín y mozzarella es una excelente elección. Es una forma sencilla de disfrutar de los vegetales frescos de temporada y crear un plato nutritivo y lleno de sabor. Prepárala en pocos minutos y sorprende a tus invitados con una ensalada que es tan hermosa a la vista como deliciosa al paladar.
Ensalada de Calabacín y Mozzarella
Ingredientes
- 2 calabacines medianos
- 200 g de mozzarella fresca (preferiblemente bolitas o perlas de mozzarella)
- Aceite de oliva virgen extra
- Vinagre balsámico o jugo de limón
- Sal, al gusto
- Pimienta negra molida, al gusto
- 100 g de tomates cherry (opcional)
- Hojas de albahaca fresca, al gusto (opcional)
- Nueces u otro fruto seco, al gusto (opcional)
Cómo preparar Ensalada de calabacín y mozzarella
- Prepara los vegetales: Lava los calabacines y córtalos en tiras finas con una mandolina o un pelador de vegetales. También puedes cortarlos con un cuchillo en rodajas muy finas si no tienes estas herramientas. Coloca las rodajas de calabacín en un tazón grande.
- Corta los ingredientes restantes: Si usas una bola de mozzarella grande, córtala en cubos. Si usas bolitas, déjalas enteras. Corta los tomates cherry por la mitad, si vas a usarlos.
- Combina todo: Agrega los tomates cherry y la mozzarella al tazón con los calabacines.
- Haz el aderezo: En un recipiente pequeño, mezcla 3 cucharadas de aceite de oliva con 1 cucharada de vinagre balsámico (o el jugo de medio limón). Sazona con sal y pimienta a tu gusto y bate bien para emulsionar.
- Adereza la ensalada: Vierte el aderezo sobre la ensalada y mezcla suavemente para que todos los ingredientes queden bien cubiertos.
- Sirve y decora: Transfiere la ensalada de calabacín y mozzarella a un plato o fuente. Si los usas, añade las nueces y decora con hojas de albahaca fresca para darle un toque aromático final. Sirve de inmediato y ¡disfruta!