Esta receta de infusión de menta, jengibre y limón es muy fácil y rápida de hacer. Es ideal para disfrutarla durante los fríos días del invierno.
El almendro ha florecido desde diciembre, las margaritas en los campos están relajadas y solo se ve nieve de pánico escénico. El tiempo se ha vuelto loco, enloquece a la naturaleza. Aunque el clima es muy frío, al menos aquí, no hace tanto frío como otras veces. En invierno, una de mis costumbres favoritas es beber té de menta.
Esta infusión con hojas de menta, jengibre y limón, que se consume mucho en los meses fríos en Holanda, ya sea entre comidas o después del almuerzo o de la cena. Es tan simple como poner un manojo de hojas de menta fresca en agua hirviendo. Usualmente usan una pequeña porción de miel para endulzarla.
Una variación que he visto (y probado) en algunos lugares es mezclarlo con jengibre fresco y limón y la verdad es que me gusta mucho su sabor. Al preparar la infusión, el jengibre da una sensación ligeramente picante, mientras que el limón da una sensación refrescante.
Este es uno de los tés de hierbas que me fascina. Con lo fácil que es preparar esta infusión con productos frescos, preparo la manta en el sofá y disfruto de una buena taza después de la comida. Pruébala y dime si no tengo razón.
Infusión de menta, jengibre y limón
Ingredientes
- 1 taza de agua
- 5 ó 6 hojas de menta
- 1/2 cucharadita de jengibre rallado
- 1 cucharada de jugo de limón, recién exprimido
- Miel, al gusto
Cómo preparar Infusión de menta, jengibre y limón
- Poner a hervir el agua en un recipiente.
- Agregar la menta y el jengibre rallado, revolver y retirar del fuego.
- Dejar infusionar durante 5 minutos, con el recipiente tapado.
- Añadir el zumo de limón.
- Endulzar con la miel a su gusto personal.
- Servir inmediatamente.
