El puré de calabaza, que te enseñaré a preparar a continuación, es una receta sencilla pero deliciosa que resalta toda la esencia de este magnífico ingrediente. Perfecto como guarnición, base para sopas o incluso como relleno para pasteles, este puré puede ser el toque mágico que eleve cualquier comida. Ahora, manos a la obra para descubrir cómo prepararlo en casa.
La calabaza, con su característico color naranja vibrante y su sabor dulce y suave, es un ingrediente versátil y nutritivo que ha conquistado las mesas de todo el mundo. Originaria de América, ha sido cultivada y utilizada por culturas ancestrales durante siglos, apreciada no solo por su sabor sino también por sus múltiples beneficios para la salud. Rica en fibra, vitaminas A y C, y antioxidantes, la calabaza se ha convertido en una favorita tanto en platos salados como en postres.
Uno de los mejores atributos de la calabaza es su capacidad para integrarse en recetas simples pero llenas de sabor. Desde sopas reconfortantes hasta pasteles indulgentes, la calabaza ofrece infinitas posibilidades culinarias como este puré de calabaza. Su textura cremosa, cuando se cocina y se mezcla, la hace ideal para crear purés que complementan una amplia variedad de platos. Además, es perfecta para quienes buscan opciones saludables y reconfortantes en sus comidas.

Receta de Puré de calabaza
Ingredientes:
- 1 calabaza mediana (preferiblemente calabaza tipo butternut o cualquier variedad que te guste)
- 2 cucharadas de aceite de oliva
- Sal al gusto
- Pimienta negra molida al gusto
- Opcional: una pizca de nuez moscada o canela para darle un toque especiado

Cómo preparar Puré de calabaza
- Preparar la calabaza:
- Lava la calabaza y córtala en trozos grandes, retirando las semillas. No es necesario quitar la piel, ya que se ablandará al cocinar.
- Cocinar la calabaza:
- Coloca los trozos de calabaza en una bandeja para horno y rocía con el aceite de oliva. Añade sal y pimienta al gusto.
- Hornea a 200 °C durante 40-50 minutos, o hasta que la calabaza esté suave y ligeramente caramelizada en los bordes. También puedes hervir la calabaza en agua con sal hasta que esté tierna.
- Preparar el puré:
- Deja enfriar ligeramente la calabaza. Si la cocinaste con la piel, retírala fácilmente una vez que esté fría.
- Coloca la calabaza en un procesador de alimentos o usa una batidora manual. Tritura hasta obtener una textura cremosa y homogénea.
- Ajusta la sazón con más sal, pimienta y, si lo deseas, nuez moscada o canela.
- Servir:
- Sirve el puré de calabaza caliente como guarnición o úsalo como base para otras recetas.
¡Disfruta del sabor reconfortante de este puré de calabaza!











