Pan de yema

En este artículo comparto la receta de un magnífico pan de yema que puedes hacer fácilmente en casa. Es riquísimo y sorprenderás a todos.

Hornear un pan de yema ha estado en mi lista de deseos de hornear por un tiempo. Lentamente me siento más cómodo trabajando con levadura, pero hornear pan lleva mucho tiempo. Es difícil sacar tiempo para hacer algo en estos días, mucho menos para hornear pan.

Sorprendentemente, un día me sobró una yema de huevo en la nevera en vez de claras. Damas y caballeros, esta es definitivamente la primera vez. Mi primer pensamiento para usar las yemas de huevo fue hacer helado, pero no teníamos espacio en el congelador (nota para mí: hacer espacio para más helado en el congelador).

Luego pensé en hacer alguna natilla pero las porciones serían demasiado grandes para nuestra pequeña familia de tres.

Por último, pensé en abordar el pan de yema. No sabía que con esta receta se hacían dos panes enormes. Bueno, podría quedarme con un pan y regalar el otro. Perfecto.

Otra ventaja es que uno o dos días después de hacer el pan puedes hacer unas tostadas francesas divinas.

Otras recetas fáciles de hacer: <<Briam: Verduras asadas estilo griego>> <<Potaje de judías blancas>> <<Carne guisada con patatas>>

Estoy muy orgulloso de mí mismo por haber horneado finalmente este pan. Era lo que imaginé que sabría divino con un exterior dorado y crujiente. Tomé unas cuantas rebanadas y les añadí mantequilla.

Este pan de yema en sí es realmente delicioso y es algo que definitivamente volvería a hacer.

Pan de Yema

Ingredientes

• 2½ tazas de agua tibia a unos 35ºC
• 1½ cucharadas (14 gramos) de levadura instantánea
• 8-10 yemas de huevo
• 5 cucharadas de aceite vegetal
• 6 cucharadas de azúcar granulado
• 7½ tazas de harina de pan sin blanquear
• 2 ½ cucharaditas de sal
• 1 clara de huevo para el huevo lavado
• 2 cucharadas de agua para los huevos lavados
• 1 cucharada de extracto de vainilla (opcional)
• 2 cucharadas de sésamo para la decoración (opcional)

Cómo hacer el pan de yema

Día 1

1. En un tazón mezcle el agua y la levadura, batiendo con la batidora de mano o con el robot de cocina, hasta que la levadura se haya disuelto.
2. Añada las yemas de huevo, el aceite vegetal, el azúcar y la vainilla y continúe batiendo.
3. Luego agregue la harina y la sal y bata hasta que la mezcla esté grumosa.
4. Usando el gancho de masa, bata la mezcla durante unos 4 minutos.
5. Colocar la masa sobre una superficie ligeramente enharinada y amasar a mano durante unos minutos o hasta que la masa esté suave y flexible pero no pegajosa (si lo está, añadir un poco de harina).
6. Dividir la masa a la mitad y colocar cada mitad en un tazón ligeramente aceitado.
7. Cubra los tazones con film transparente y déjela reposar en el refrigerador durante toda la noche.

Día 2

1. Dos horas antes de hornear, retire la masa del refrigerador.
2. Coloque una bola de masa en una superficie ligeramente enharinada y dele la forma que desea que tenga. Puede hacer una enorme hogaza o darle forma de panecillos.
3. Coloque en la bandeja de hornear.
4. Repita con la otra bola de masa.
5. Mezcla la clara de huevo con las 2 cucharadas de agua para hacer el huevo lavado.
6. Pincela generosamente cada pan con el huevo lavado y pon el resto del huevo lavado en el refrigerador.
7. Deje que el pan se levante de nuevo, sin cubrir, durante 1 hora.
8. Pincele nuevamente cada pan con el huevo lavado.
9. Deje que el pan vuelva a subir durante otra hora o hasta que tenga 1,5 veces su tamaño.
10. Quince minutos antes de hornear, precaliente el horno a 180ºC.
11. Hornee durante 20 minutos.
12. Luego gire el molde y hornee por otros 15-30 minutos o hasta que escuche un sonido hueco cuando deje caer el pan sobre la encimera de su cocina.
13. Si no escuchas el sonido, hornea unos minutos más.
14. Deje que el pan de yema se enfríe por lo menos 45 minutos antes de cortarlo.