El rosti de calabacín es una deliciosa opción para aprovechar esta verdura de temporada. Es muy fácil de hacer y gustará a todos los comensales.
El rosti de calabacín, con su textura crujiente por fuera y jugosa por dentro, lo convierte en un acompañamiento versátil que combina perfectamente con infinidad de platos. Además, su preparación es sencilla y requiere pocos ingredientes.
El rosti de calabacín es ideal para acompañar carnes o pescados. También puede ser un buen plato de un menú vegetariano. Al cocinarlo puede desmoronarse ligeramente ya que no tiene adicionado ningún ingrediente que lo aglutine como huevo o maicena.
Rosti de Calabacín
Ingredientes:
- 1 calabacín (unos 500 g)
- Sal, al gusto
- Aceite de oliva virgen extra
Cómo preparar el Rosti de Calabacín
- Lava y seca bien los calabacines. Deberían pesar algo más de 500 g entre los dos.
- Corta la punta del calabacín y rállalo por el lado más grueso de un rallador grueso o con un procesador adecuado. Si lo deseas puedes pelar el calabacín antes de rallarlo.
- Mezcla el calbacín rallado con una buena pizca de sal y coloca en un colador. Deja reposar 30 minutos para que escurra una buena parte del agua que contiene.
- Pasado este tiempo, coloca el calabacín escurrido en un paño limpio. Forma un hatillo estrujando muy bien el calabacín y empieza a escurrir apretando todo lo posible para terminar de extraer toda el agua.
- Calienta un poco de aceite de oliva en una sartén, preferiblemente de fondo grueso y antiadherente.
- Echa el calabacín rallado y escurrido. Saltea un poco y comienza a dar forma como de tortilla, compactando el calabacín. El grosor del rosti debe ser de un dedo aproximadamente.
- Cocina a fuego medio-bajo durante unos 15 minutos. Hay que estar atento para que no se queme.
- Comprueba que no se ha pegado pasando una espátula fina por debajo del rosti, sin levantar la masa.
- Voltea el rosti colocando un plato sobre la sartén y devuelve a ella para dorar el otro lado. Buscamos que
- Continúa la cocción, volviendo a darle la vuelta si fuera necesario, hasta que se forme una capa exterior algo dorada y crujiente.
- Retira la sartén del fuego.
- Sirve el rosti inmediatamente.