Receta Polenta perfectamente cremosa

¿Te preguntas cómo se hace la polenta? Esta cremosa receta polenta es muy fácil de hacer, tiene sólo 3 ingredientes y queda maravillosamente espesa y deliciosa.

La polenta puede sonar glamorosa, pero no es otra cosa que harina de maíz al estilo italiano. Esta guarnición se encuentra a menudo en los menús de los restaurantes, pero afortunadamente, es muy fácil de hacer en casa.

Para esta receta polenta sólo se necesitan 3 ingredientes. Siguiendo los pasos tendrás una polenta deliciosa, dorada y cremosa. Espolvorea con un poco de queso parmesano o Gouda por encima de la polenta y será más sabrosa todavía.

Aquí está como hacer esta receta polenta casera.

Cómo hacer polenta

Después de varios intentos he logrado hacer con éxito esta simple y cremosa receta polenta que requiere pocos ingredientes y muy poco esfuerzo. Cocinar la polenta es más fácil de lo que puedes imaginarte. Todo lo que necesitas son tres ingredientes:

• Harina de maíz
• Agua
• Mantequilla con sal

Ahora, esta es sólo la receta base. Para añadirle sabor, puedes añadir un poco de queso al mezclar la mantequilla. El queso añade una deliciosa nota salada que lo hace parecer un plato mucho más elegante de lo que es en realidad. Ten en cuenta que el queso tiene sal, así que agrégalo poco a poco y prueba primero antes de agregar más.

También ten en cuenta que en esta receta polenta se utiliza la harina de maíz, no la sémola de maíz. La sémola es más gruesa que la harina de maíz, por lo que la textura no será la misma con una que con otra. En algunos paquetes de harina de maíz también se especifica que es para preparar «polenta».

Cómo guardar las sobras de la polenta

Con esta receta polenta se obtienen alrededor de 4 tazas, así que es difícil que quede algo. Pero si así fuera, puedes guardarlas en el refrigerador durante 3 o 4 días. Cuando la polenta se cocina y se enfría se pone dura, pero puedes suavizarla de nuevo si, cuando la calientes en el fogón, la mezclas con un poco de leche o de agua hasta que alcance la consistencia deseada.

También puedes verter la polenta en un molde para hornear antes de refrigerarla y cuando la vayas a utilizar, la cortas en cuadrados y la fríes en un poco de aceite de oliva o mantequilla hasta que se dore por ambos lados. El exterior quedará ligeramente crujiente, mientras que el interior estará suave.

Qué servir con la polenta

Debido a que la polenta tiene un trasfondo naturalmente dulce, se combina bien con platos ricos y sabrosos y es una buena alternativa a la pasta. Puedes servirla con carnes o pescados en salsa, mariscos, verduras salteadas.

Con unos camarones al ajillo o a la parrilla encima de la polenta será un plato espectacular. En mi casa la comemos muchas veces con huevo frito. También a esta receta polenta puedes añadirle algunas hierbas frescas dependiendo de con qué la vas a servir. Un toque de ajo también le va muy bien.

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¿Es saludable la polenta?

La polenta se hace con la harina elaborada con el grano entero, que es bastante bajo en calorías, sin gluten y una buena fuente de fibra. Sin embargo, si la polenta es saludable o no, depende de con qué la sirvas. Algunas recetas llevan una buena dosis de mantequilla o crema de leche para que tenga una textura cremosa. En esta receta polenta he usado una cantidad muy pequeña de mantequilla, pero si lo deseas, puedes sustituirla por aceite de oliva.

Esta cremosa receta polenta es vegetariana y sin gluten.

Receta Polenta

Ingredientes

• 4 tazas de agua
• 1 taza de harina de maíz
• 2 cucharadas de mantequilla
• Sal al gusto.

Cómo hacer la Receta de Polenta

1. Ponga a hervir el agua en una cacerola mediana.
2. Cuando el agua hierva, añada la harina de maíz en un flujo lento y constante, revolviendo constantemente para evitar que se formen grumos.
3. Continúe revolviendo hasta que la polenta empiece a espesarse (alrededor de 1 a 2 minutos).
4. Añade un poco de sal.
5. Reduzca el calor para que la polenta burbujee lentamente.
6. Continúe cocinando, revolviendo ocasionalmente, durante unos 20 minutos hasta que la harina de maíz pierda su sabor a crudo (pruebe de vez en cuando para comprobarlo).
7. Cuando la polenta esté lista, apague el fuego y añada la mantequilla.
8. Rectifique la sal.
9. Puede cubrirla para mantenerla caliente antes de servirla.
10. Si la polenta se vuelve demasiado gruesa, puedes añadir un poco de leche o agua para aflojarla.

Nota:

Para obtener aún más sabor, puedes añadir un poco de queso rallado junto con la mantequilla.