En el artículo de hoy te comparto la receta de Fantasía de manzana y chocolate, un postre riquísimo con el que sorprenderás a todos. Es facilísimo de hacer y los aplausos los tendrás garantizados, sobre todo de los más pequeños.
Las manzanas enteras cubiertas de chocolate o de caramelo suelen ser un poco difíciles de comer y siempre se termina con la manzana en suelo y la cara y las manos todas embarradas, en fin, un verdadero lío. Pensando en la próxima visita de mis sobrinos decidí ponerme manos a la obra y hacer algo similar pero más pequeño y manejable.
Son muy fáciles de hacer, basta con usar una boleadora de melón para sacar las bolas de manzana, ponerlas en un palito de brocheta, sumergirla en chocolate derretido y finalmente decorarlas con diferentes tipos de grageas. Si prefieres que no todas sean con chocolate, las bolitas de manzana también quedan muy sabrosas con un baño de caramelo.
Una vez que el jugo de las manzanas se empieza a mezclar con el chocolate es posible que se ponga un poco granuloso, para evitarlo debes trabajar rápidamente la cobertura. Es fatal hacer una pausa para sacar más bolas de manzanas, el chocolate se endurecería y no podrías bañar las manzanas.
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En un tazón coloqué una manzana entera para ir clavando los palitos con las que ya iba cubriendo de chocolate. Esto me facilitó ponerle las grageas y que el chocolate se endureciera antes de llevar los tazones para la mesa.
Fantasía de manzana y chocolate
La Fantasía de manzana y chocolate es un postre riquísimo con el que sorprenderás a todos. Es muy fácil de hacer, basta con hacer pequeñas bolas de manzana, sumergirlas en chocolate derretido y decorarlas con grageas.
Ingredientes
- 2 manzanas grandes (salen entre 6 y 8 bolas de cada manzana)
- 1 tableta de chocolate con leche (200 g aproximadamente)
Preparación
- Prepara varios recipientes con diferentes tipos de grageas.
- Parte la tableta de chocolate con leche en trozos pequeños.
- Con la boleadora de melón ve haciendo las bolas de la manzana.
- Coloca un palito en cada bolita.
- Derrite el chocolate. Puedes hacerlo en una cacerola a fuego directo muy bajo, en el microondas o en baño maría.
- Sumerge, una a una, las bolitas de manzana en el chocolate derretido.
- Sacúdelas suavemente un par de veces para eliminar el exceso de chocolate.
- Pásalas por las grageas.
- Colócalas en la manzana del tazón, clavando el palito.
- Espera a que el chocolate se solidifique.
- Reparte los tazones y a disfrutar con las caras de alegría de los peques.
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