Para obtener alimentos suaves y con un sabor especial puedes marinarlos o macerarlos. Hoy vamos a aprender cómo marinar o macerar nuestros platos.
Marinar consiste en cubrir un alimento con una marinada durante un tiempo determinado antes de cocinarlo.
Una marinada es una mezcla de aceites que mantienen la humedad de los alimentos mezclando sus sabores, ácidos que ayudan a suavizarlos y sazonadores, especias y hierbas y vegetales.
Aprendiendo a marinar o macerar en casa
Hay tres tipos de marinada:
- Marinada cocida: tiene efectos rápidos y se prepara así: en una olla con aceite fríe cebolla, apio y zanahoria hasta que la cebolla se vea transparente. Agrega la cantidad de vino y vinagre que sean necesarios para la cantidad del alimento a marinar. Añade sal, hierbas y condimentos. Tapa la olla y deja cocer durante 30 minutos a fuego lento. Deja enfriar para que puedas sumergir el alimento.
- Marinada cruda: tiene un efecto sazonador lento. El alimento debe permanecer más tiempo en ella. Para hacerla coloca el alimento en un recipiente de vidrio o en una bolsa hermética. Agrega laurel, sal, pimienta, ajo picado y vino o vinagre. Tápalo y deja reposar en refrigeración.
- Marinada seca: consiste en untar en el alimento, sal, especias y hierbas. Después se deja reposar. Sólo se usa para dar sabor.
Tiempos necesarios para maridar
- Los tiempos para marinar son de 15 a 30 minutos para piezas pequeñas de carne, pescado o verduras suaves.
- De una a tres horas pechugas de pollo, bistec o verduras fibrosas.
- De 2 a 6 horas los cortes gruesos de carne de res, pollo entero y piernas de cordero.
- De 6 a 12 horas para cortes muy grandes de carne, costillas, jamones enteros y pavo.
Desecha la marinada una vez que cumpla su función. Sólo en el caso de las verduras puedes reutilizarla para sazonar otra preparación.
Macerar de manera correcta
Macerar es un método para intercambiar sabores. Los alimentos se sumergen en líquidos como aceite, vinagre, licor o vino.
A diferencia de la marinada no requiere especias o hierbas, además los líquidos no se desechan ya que forman parte del producto final.
Al marinar o macerar utiliza materiales resistentes a los ácidos: bolsas de plástico, recipientes de vidrio o acero inoxidable.
Si el tiempo requerido es menos de una hora puedes dejar el alimento a temperatura ambiente, si es mayor refrigéralos.