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Mejillones y patatas fritas al estilo belga

Hoy les comparto los Mejillones y patatas fritas al estilo belga, dos fáciles y deliciosas recetas que le gustarán a todos.

Estuve de visita en Bélgica una vez más y en esta ocasión encontré la que creo es mi ciudad belga favorita. Gante es una ciudad bella. A media hora en tren de Bruselas y de Brujas. Destaca por la juventud que llena sus calles y bares, gracias a sus excelentes universidades y por qué no, también por su extraordinaria gastronomía, entre la que destaco los platos elaborados con mejillones y las patatas fritas belgas. La UGent es una de las mayores de las universidades de Bélgica.

Gante es, entre otras cosas, la ciudad natal de Carlos V (Carlos I de España) nieto y heredero de los Reyes Católicos e hijo de Juana I de Castilla, Emperador del Sacro Imperio Romano Germánico, Rey de España, Nápoles, Sicilia y Cerdeña, Duque de Borgoña y Archiduque de Austria. Casi nada ¿eh?

Mejillones

Otras recetas fáciles: <<Saltimbocca con lomo de cerdo>> <<Salsa Bechamel>> << Lazos de hojaldre con queso >>

En la ciudad se respira una mezcla de modernidad e historia.

Cuando el tiempo lo permite, no muy a menudo es cierto, las orillas del Graslei (muelle de las hierbas), se llenan de personas disfrutando de las terrazas de sus innúmeros bares y restaurantes.

Tomarse unas cervezas belgas (de las mejores del mundo) y comer unos mejillones con patatas fritas admirando sus edificios de arquitectura románica, renacentista y gótica viendo pasar los barcos por el canal, no tiene precio.

Por eso hoy voy a compartir contigo una receta de mejillones, que aprendí a hacer en Gante con mi amiga Nadine.

Receta de Mejillones belgas

Ingredientes para 4 personas

  • 2 kg de mejillones frescos y limpios
  • Un apio entero picado en rodajas bien finas
  • Cuatro chalotas picadas
  • 100 g de mantequilla
  • 1 cucharada de aceite de oliva
  • 1/2 litro de natas
  • Una taza de vino blanco seco
  • Sal
  • Pimienta
  • Perejil
  • Cilantro

Cómo preparar mejillones belgas

  1. En una cazuela honda pon a pochar el apio y las chalotas con la mantequilla y el aceite. Cuando casi estén transparentes echa los mejillones bien limpiecitos.
  2. Remuévelos un poco y agrega el vino y las natas. Mejillones
  3. Tapa por unos cinco minutos, pasado este tiempo abre, remueve y comprueba que los mejillones estén abiertos, si no tapa otros dos o tres minutos.
  4. Cuando ya estén abiertos es la hora de servirlos, te recomiendo servirlos en un plato bien hondo para que puedas echarle bastante salsa y entonces le añades por encima un puñado de perejil y cilantro cortados bien pequeños.
  5. Para darles un sabor más refinado a este plato, puedes agregar junto a las natas y el vino una cucharada de Ricard o Pastis.
  6. Acompaña este plato con patatas fritas hechas al más puro estilo belga.

¿Qué cómo se hacen las patatas fritas en Bélgica? Pues ya te cuento…

Recetas de patatas fritas estilo belga

  1. Escoge dos patatas de las de freír grandes por persona, pélalas y corta las patatas en bastones más bien gruesos.
  2. Cocínalas a baja temperatura (120 grados centígrados) en abundante aceite vegetal para freír.
  3. Cuando ya estén más o menos blandas retíralas del aceite y ponlas a descansar en papel absorbente hasta que estén frías.
  4. Entonces vuelve a poner el aceite al fuego esta vez a fuego alto. Mejillones
  5. Cuando el aceite alcance su temperatura máxima fríe las patatas nuevamente hasta dorarlas.

De esta forma las patatas tendrán un corazón blando y el exterior crujiente y dorado, perfectas para mojar en la salsa de los mejillones a la belga.

Nada mejor para acompañar este plato de patatas fritas belgas que una cerveza belga.

¿Ya te he dicho que son mis cervezas favoritas?

Bueno puedes escoger entre las más de trecientas cervezas que tienen los belgas. Pero como estamos en “modo Gante” te recomiendo una Kwak.

Si vas a Gante visita el bar “De Dulle Griet” y en él no pidas un “Maxi” a no ser que lleves un par de zapatos de repuesto pues al pedirlo tienes que dejar un zapato como “prenda” dentro de una cesta que cuelga del techo. Claro, se quedan con tu zapato hasta que devuelvas la jarra de litro y medio de Kwak que pediste.

Ya sabes si vas a Bélgica no dejes de visitar Gante y probar algunas otras cervezas belgas.

¿Ya te conté que son mis cervezas favoritas?

Chao pesca’o!

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